Vistas de página en total

jueves, 1 de septiembre de 2011

Crisis inmobiliaria, causas y consecuencias

por Hernán Hernández Sánchez


Nuestro país sin duda alguna ha sido alcanzado por diversos periodos de estancamiento y retroceso económico, sobre todo en las últimas décadas, generaciones enteras hemos nacido y crecido en un país con una crisis cuasi permanente, vivimos en un momento en el que un nuevo milagro mexicano parece inalcanzable, por un lado por el atraso existente y persistente en la innovación y el desarrollo de las actividades productivas, por otro lado la falta de lineamientos que regulen las instituciones bancarias y las impulsen a ejercer su papel como medios de financiamiento para sostener al menos los medios productivos.

Sin duda la crisis más profunda y como consecuencia la más recordada fue la crisis vivida en la primera mitad de la década de los noventa, crisis ocasionada por las malas decisiones en políticas económicas que llevaron a una fuga de capitales excesiva. Pasado ese fenómeno se establecieron medidas de prevención a una nueva crisis ocasionada directamente por el mal manejo de la economía; sin embargo, con el crecimiento del fenómeno denominado Globalización, ya  no basta con estar al pendiente de no cometer errores en el manojo de la economía de un país, sino estar preparado para responder a las consecuencias que pueda traer una caída en el crecimiento económico de los demás países, especialmente si se tienen intercambios comerciales con ellos.
Lo anterior nos lleva a la crisis vivida en el 2008 en todo el mundo, originado por la caída del sector inmobiliario. Dicha caída solo pudo ser posible gracias a la falta de precaución por parte de los bancos de inversión, quienes implementaron obligaciones colaterizadas de deuda lo cual se transfiere gran parte del riesgo a los ahorradores, por otro lado se busco otro tipo de protección a través de la venta de seguros conocidos como Credit Deficit; sin embargo con la ruptura de la burbuja de precios de bienes inmuebles, los derivados hipotecarios y los seguros cayeron drásticamente, el financiamiento se ve comprometido y las instituciones bancarias deben vender activos a precios cada vez más bajos, se restringen los créditos otorgados y contagia a los demás sectores.
El sector financiero ha alcanzado a la fecha un peso enorme en la economía de cualquier país, y la especulación que se da en dicho sector mantiene al aire la suerte que depara a las economías mundiales en un plazo cada vez menor.
Después de conocer la causa de la crisis inmobiliaria surge la pregunta, ¿cómo la caída de los precios de los bienes inmuebles afecta la estructura económica de nuestro país? Primero debemos establecer que la estructura con la que cuenta México no es solida existen diversas variables que afectan el desarrollo de la productividad como se menciono al comienzo de este escrito, la banca comercial nacional dedica casi la totalidad de sus préstamos al consumo dejando de lado la financiación de la producción; obligando a empresas de gran tamaño a buscar financiamiento en el extranjero, llevando a la deuda externa privada a representar el 70% de la deuda total del país. Este proceso sumado a la creciente cantidad de adeudos vencidos en los préstamos al consumo ha llevado a desarrollar un sistema financiero nacional incompetente y endeble ante la crisis financiera del primer mundo amorillándolo a sucumbir ante la crisis iniciada en mercados ajenos al nacional.

No hay comentarios:

Publicar un comentario